martes, septiembre 09, 2008

Irreversible

Hoy estaba en la peluquería, sitio que no suelo frecuentar. Trabajo desde casa (salvo las tres horas semanales en el colegio) y mi pelo suele estar hecho una maraña porosa de rulos. Pero hoy tenía reunión con nueva institución a asesorar y tenía que mostrarme un poco más decente. Los próximos encuentros serán vía email, por suerte.
Pero estaba con lo de la peluquería. Qué bien que hace de vez en cuando salir a la calle y ver que una no es la peor de todas ni mucho menos. Uno de los rasgos que más me caracterizan (y el motivo central -al menos el conciente- por el que la semana pasada retomé diván) es mi insatisfacción: compro algo y, en el 90 por ciento de los casos, quiero cambiarlo. Me pasa con los botas, la ropa, los sillones, la pintura, las zapatillas, con los pisos, la compu´(estos dos últimos ítems no los pude cambiar, lo cual me generó una tremenda angustia). cuando puedo cambiar el objeto adquirido, la angustia pasa. Hoy, en la peluquería, mientras me limaban las uñas (what?), veo a una chica haciéndose extensiones y escucho algún que otro fragmento de su conversación con su novio vía celular. "Amor, me podés regalar las extensiones que me faltan? Son 500 pesos. Gracias, amor". Hasta ahí todo bien. Entonces, la manicura empieza a contarme la historia de esta chica. Llegó a la peluquería a cortarse el pelo. El peluquero hizo lo suyo. El corte -para mi mirada- quedó super cool. La chica, hay que aclarar, era preciosa, lindos rasgos, alta, morocha y de ojos azules, remera roja de kosiuko, all stars. Luego del corte, entró en pánico, se puso a juntar todo el pelo del piso y le pidió al peluquero que volviera el tiempo atrás. Entonces, el tipo, tuvo que empezar a pegarle las extensiones, con su mismo pelo, una por una.
Ante esta escena, ¿qué fue lo primero que pensé? "Esto podría haberme pasado a mí". Esa chica me trajo consuelo. Aunque, hay que tener un novio que te salve las papas quemadas, que ponga sin reparos quinientos para salvar tu angustia ante lo irreversible... el pelo cortado ¿la castración? lo último que quiero de este blog es que se vuelva psi, dios me libre de lacan en este espacio.

1 comentarios:

Blogger Una ha dicho...

Ja! Para eso sirve lo Psi así que ojalá Dior no te libre de Lacan así no se te impone llorar sobre el pelo derramado!!

11:24 a. m.  

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